lunes, 30 de agosto de 2010

Daniel Anido y sus huevos


52 periodistas deportivos se han ido de la SER a la COPE. Señoras y señores ¡52 nada menos! De lo cual se extrae una conclusión inmediata: muy poco cariño le tenían a De La Morena.
Debía ser tal el hartazgo que tenían con su líder, devenido en otro Butanito, que aprovecharon la ocasión para huir en desbandada, detrás de ellos no ha quedado nada.
Lo más gracioso es que si el directivo de la SER Daniel Anido no se hubiese pasado varios pueblos, todos seguirian con De La Morena, haciendo el programa y odiándole en la sombra. Pero el tal Anido, conocido por echar a Paco gonzález, cometió el error de decir:
«Esto es un chantaje y tú ahora vas a hacer el programa por mis huevos», llegó a decirle Anido, desatando definitivamente el conflicto. «Pues por mis huevos que no hago ese programa», replicó González, que fue apartado de la dirección del Carrusel a continuación, con los resultados que todos sabemos.
Parece mentira, el estólido lenguaje machista, impropio de la cadena "progresista", provocó la mayor fuga de profesionales y el mayor desastre periodístico en la historia de la SER.
Los directivos de la SER deben estar contentísimos con el amigo Anido.

martes, 17 de agosto de 2010

De Aristóteles a Woody Allen


"De Aristóteles a Woody Allen"de Pedro L. Cano es un libro interesante con algunos peros.
Trata, como reza el subtítulo, de la permanencia de la Poética de Aristóteles y los elementos clásicos de la retórica en la escritura para guiones de cine y televisión. Leyéndolo uno lamenta no tener una mejor formación clásica ya que es fascinante cómo llega su huella hasta nuestros días. Es curioso, por cierto, como en la narrativa se ha avanzado y experimentado tanto y, sin embargo, en el ámbito de los guiones de producciones audiovisuales se sigue casi férreamente el sistema aristotélico de exposición nudo y desenlace.
Tengo la impresión de que el libro es mejor cuando habla de la Poética que cuando habla de la retórica. Por ejemplo, para hablar del paralelismo (p.106-107) usa un verso de Hamlet "With mirth in funeral and with dirge in marriage" que traduce como: "Con mirto en su funeral y con responsos en su matrimonio", y después de un largo párrafo en el que explica este verso pasa a ocuparse de la película Fresas salvajes y se pregunta: "¿por qué demonios no habrán traducido Fresas silvestres?" Y tiene razón, lo malo es que su propia traducción del verso del rey Claudio sea tan deficiente. Efectivamente, "mirth" no se puede traducir por "mirto", aunque la grafía sugiera un cierto parecido. Nada tiene que ver; mirth, puede traducirse como alegria, diversión, risa, etc. En otras palabras, la frase podría traducirse, conservando el paralelismo y la antítesis, aproximadamente como "con risa en el funeral ocon llanto en el matrimonio", o si se quiere "con regocijo en el funeral y con duelo en los esponsales".
Cierto es que a partir del original se pueden generar muchísimas traducciones posibles, porque cualquier versión no agota los múltiples matices del original. Dirge es un canto fúnebre y es de difícil traducción, aunque alguno la ha traducido como endecha, vocablo correcto en este caso. En fin, traducciones hay muchas y siempre es obligado optar por alguna solución, pero entre esas soluciones pienso que no se haya mirto, myrtle en inglés.
Otro pero que se le puede poner al libro es que no cite a Foster cuando se refiere a personajes planos y redondos. Para Cano planos son aquéllos que se atienen estrictamente a unos estereotipos y redondos aquéllos que combinan aspectos combinados de algunos de ellos (p.61) Aunque los define de un modo distinto a Foster está clara su fuente. Para Foster puede haber round y flat characters, siendo los primeros personajes complejos que experimentan alguna evolución en la narración, y los segundos aquéllos que no experimentan variación alguna. por lo menmos hasta donde yo recuerdo es así como los define Foster en "Aspects of the Novel".

sábado, 7 de agosto de 2010

El mundo según Garp


He disfrutado leyendo "El mundo según Garp". Es un libro en el que se encuentra humor, metaliteratura, y también fanatismo y muerte. No es un libro lúgubre, sin embargo; cuando aparece la muerte o el fanatismo, aparecen por sorpresa, teñidas de absurdo, poniéndolas, como Marco Aurelio, que tiene su papel en la novela, en su lugar. Por cierto que el mundo de Garp un poco a la manera de Tristam Shandy, empieza antes incluso de su concepción, con la historia de su madre, Jenny Fields. Es un libro que se lee con placer viendo el mundo con los ojos de Garp.
También he visto la película, pero, desafortunadamente, es una pálida sombra de la novela. Es, como casi todas las versiones, otra obra, muy distinta. Es difícil desde luego escoger qué partes de la novela se han de trasladar al cine pero en esta ocasión no han conseguido ni aproximarse a la obra original. Las fanáticas ellenjamesianas de las que se ríe Garp en la novela, son aquí presencia ominosa y funesta. Se pierde la ironía y el absurdo. Por otra parte, para salvar las deficiencias que tiene el guión se recurre demasiadas veces a que los personajes expliquen lo que ha pasado en unas líneas, lo que no resulta demasiado cinematográfico.