domingo, 12 de febrero de 2012

Risible Riestra



Hoy nos castiga La Voz de Galicia con una columnita de Eduardo Riestra que merece por lo menos, para el lector avisado, un par de comentarios.
Habla, supongo, de la necesidad de aprender inglés en el mundo actual, pero parece que lo hace mezclando en la turmix a Zapatero, Franco, Pajín, julio Camba, Gibraltar, Margallo, Bibiana Aído, etc. Tampoco queda claro si tiene algo contra el alemán, o si le parece pintoresco el alfabeto sueco, tal es la confusión del articulito en cuestión. En fin, allá el con su magín, pero a la papilla que producen sus sesos le salen grumos.
Lo que resulta más indigesto son sus referencias a la traducción en general, y a Unamuno en particular. De la traducción nos desliza una frase chocante: "Antes se traducían novelas aunque los traductores usaran el diccionario" Caramba, ¿es que los que traducen no pueden usar el diccionario? Yo conocí al autor de la penúltima traducción del Quijote al inglés y hablaba maravillas del diccionario de María Moliner, ¿acaso hacía trampa?. Evidentemente no; los traductores no usan solo un diccionario, sino muchos para una simple obra, es un instrumento más junto con la web, y otras muchas fuentes, actuales e históricas, para realizar responsablemente una traducción. Si para traducir un idioma bastase mirar un diccionario podríamos cerrar las facultades de traducción e interpretación para siempre-
Por otra parte, del autor vasco nos dice que aprendió una extraña lengua para poder leer a Ibsen. Esto queda así como muy guay; es una lástima que don Miguel a quien quería leer en relidad era a Kierkegaard, es decir, que lo que aprendió fue danés, no el noruego de Ibsen. Le dejo la imagen del libro de Evans, que usted sin duda podrá leer en versión original.